Hola amiga, ayer tuve el privilegio de compartir con otras mujeres y quisiera dejar esa reflexión en este blog para que todas ustedes puedan leerla y conocer que Dios tiene un propósito para tu vida.
Estoy escribiendo un libro de discipulado con el mismo nombre y se basa en la historia de Agar. Siempre creí que era la menos importante del relato, pero, increíblemente, me sentí tan identificada con ella que me decidí a indagar más en cada detalle de lo que se cuenta de esta esclava egipcia.
He dividido la enseñanza en dos partes, inspirada en la respuesta de Jesús a María cuando se había quedado en el templo: «Acaso no sabes que en los negocios de mi Padre me conviene estar?» (Lucas 2.49).
Una primera parte se basa en la afirmación «MI PADRE», aludiendo IDENTIDAD, y la segunda, en la parte donde declara «NEGOCIOS… ME CONVIENE ESTAR», aludiendo PROPÓSITO.
1. IDENTIDAD
Vamos a Génesis 16.
¿Quiénes somos? Muchas veces somos atrapadas por mentiras que nos convencen de lo que no somos. Aquí van 3 verdades básicas que debes creer.
También puedes leer IDENTIDAD: LO QUE NECESITAMOS PARA VIVIR.
a) PARTE DE UNA FAMILIA
Primera gran verdad: eres parte de una familia.
En Génesis 16.9 el ángel del Señor le dijo a Agar:—Regresa a tu señora. Esa simple orden me hace entender que Agar formaba parte de esa familia. Vuelve, no estás sola en esto. Tienes familia. Eres parte.
Me encanta cómo Pablo compara lo que éramos y lo que ahora somos en Cristo, y tiene especial cuidado en aclararnos que somos parte de la familia de Dios.
- Efesios 1.13-14: …cuando creyeron en Cristo, Dios los identificó como suyos al darles el Espíritu Santo…El Espíritu es la garantía que tenemos de parte de Dios de que nos dará la herencia que nos prometió y de que nos ha comprado para que seamos su pueblo.
- Efesios 2.11,13: No olviden que ustedes, los gentiles,antes estaban excluidos. Eran llamados «paganos incircuncisos» En esos tiempos, ustedes vivían apartados de Cristo. No se les permitía ser ciudadanos de Israel, y no conocían las promesas del pacto que Dios había hecho con ellos. Ustedes vivían en este mundo sin Dios y sin esperanza, pero ahora han sido unidos a Cristo Jesús. Antes estaban muy lejos de Dios, pero ahora fueron acercados por medio de la sangre de Cristo.
- Efesios 2.19: Así que ahora ustedes, los gentiles, ya no son unos desconocidos ni extranjeros. Son ciudadanos junto con todo el pueblo santo de Dios. Son miembros de la familia de Dios.
El salmista también lo declara en el conocido salmo 100: Pueblo suyo somos y ovejas de su prado.
No andes por la vida creyendo que no eres parte de nada. El Rey de reyes te ha unido a su familia y no porque seamos perfectas, bonitas o cantemos bien, sino sólo por su misericordia. Por lo tanto, no esperes ser digna para formar parte de la familia de Dios, no intentes cambiar nada por tu cuenta antes de acercarte al Padre. Él ya hizo eso por ti.
b) LIBRE
Segunda gran verdad: eres libre. En Génesis 16.1, el relato nos cuenta que Agar era esclava (doulos), o sea, una persona que no tiene derechos ni privilegios. Sometida a otra persona muchas veces en contra de su voluntad.
Aunque la esclavitud es una pesadilla que está lejos de nuestros contextos, hoy en día, hay muchas maneras de ser esclavas.
En ocasiones, otras personas nos han causado tanto daño que nos dejaron grilletes pesados que no nos dejan vivir libremente. Deja que el Espíritu Santo te revele en qué aspecto estás viviendo en esclavitud, pero recuerda que nuestra pelea no es contra personas (Efesios 6.12).
Por eso, es bueno pedirle a Dios que te revele la verdad porque … conocerán la verdad, y la verdad los hará libres (Juan 8.32).
Marca algunas mentiras que te esclavizan:
Eres rechazada – no tienes valentía – eres indigna – estás sola – eres insuficiente – eres imperfecta – eres incompleta – eres débil – eres sin importancia – no tienes valor – eres un Accidente – eres una vergüenza – no tienes perdón – eres inútil – …
Pasé por estas mentiras y muchas otras (que relato en el libro) y me costó años poder darme cuenta que estaba viviendo con grilletes que no me dejaban avanzar.
En Gálatas 5.1, Pablo nos dice: Por lo tanto, Cristo en verdad nos ha liberado. Ahora asegúrense de permanecer libres y no se esclavicen de nuevo a la ley.
- ¿Qué pasa si Cristo nos libera? seremos verdaderamente libres
- ¿De qué debemos tener cuidado? de no volver a esclavitud
- ¿Qué tiene de malo la ley? con la ley creemos que podemos llegar a ser justos por nuestras propias obras
c) HIJA
Esta tercera verdad será trascendente en tu corazón. Eres hija. Podríamos ser parte de una familia como sobrinas o como allegadas, pero el Padre quiso adoptarnos como hijas.
No sé que tipo de papá tuviste o tienes. El mío, como he contado en otras reflexiones, era un tipo bacán. Pero aún así, Dios me mostró que Él podía ser aún mil veces más bueno que mi padre. Esta revelación vino después de la muerte de mi papá terrenal y al sentirme huérfana del amor paternal, Dios me hace ver que el mejor Padre del mundo estaba esperando tener una hermosa relación conmigo.
“Y ustedes no recibieron un espíritu que de nuevo las esclavice al miedo, sino el Espíritu que los adopta como hijas y les permite clamar: “¡Abba! ¡Padre!”. El Espíritu mismo asegura a nuestro espíritu que somos hijas de Dios” (Romanos 8.15-16).
En Juan 1.12 – 13, vemos que para tener el derecho de ser hija solo basta creer. ¿Crees en Dios? ¿Aún no te sientes digna de su amor? Pues Él te quiso adoptar por su propia voluntad y «eso es precisamente lo que él quería hacer, y le dio gran gusto hacerlo» (Efesios 1.5). Simplemente, quería demostrarnos su gran amor (1 Juan 3.1).
Soy madre de dos hijos y me ayuda entender Lucas 11.11-13 ¿Cómo nos trata Dios Padre? como un padre bondadoso. Nunca dejaremos de querer a nuestros hijos, hagan lo que hagan. Asimismo, el Padre promete amarnos hasta el fin.
«Así que acerquémonos con toda confianza al trono de la gracia de nuestro Dios. Allí recibiremos su misericordia y encontraremos la gracia que nos ayudará cuando más la necesitemos» (Hebreos 4.16).
Un día, viajé a ver a mi madre y al llegar a su casa, muy de mañana, me di cuenta que tenía sin carga el teléfono. Comencé a tirar piedras sobre el techo de la casa para despertar a mamá y lo logré. Se levantó y me abrió la puerta. Como era aún temprano, busqué entre sus cosas un pijama y me metí a su cama, mientras ella me preparaba un desayuno express. Ahí estuvimos regaloneando un rato y haciendo que las horas sean eternas. A esa confianza se refiere el escritor de Hebreos. Eso es lo que espera el Padre de nosotras.
También puedes leer Revista Soy donde hablamos más de este tema.
2. PROPÓSITO
Hay mucho argumento para afirmar que nuestra vida tiene una razón trascendente. La Biblia nos dice de muchas maneras, que Dios preparó algunas tareas para que cumpliéramos mientras vivimos en este escenario.
Veamos algunos de esos versos:
- Muchos pensamientos en el corazón del hombre, pero es el propósito del Señor que prevalece” (Proverbios 19:21).
- “Y sabemos que a los que aman a Dios, todas las cosas les ayudan a bien, esto es, a los que conforme a su propósito son llamados.” (Romanos 8:28).
- Quien nos salvó y llamó con llamamiento santo, no conforme a nuestras obras, sino según el propósito suyo y la gracia que nos fue dada en Cristo Jesús antes de los tiempos de los siglos” (2 Tim 1:9).
- 1 Tesalonicenses 5:24 El que los llama es fiel, y así lo hará.
Efesios 2.10: Pues somos la obra maestra de Dios. Él nos creó de nuevo en Cristo Jesús, a fin de que hagamos las cosas buenas que preparó para nosotros tiempo atrás.
- Jeremías 29.11: Pues yo sé los planes que tengo para ustedes —dice el Señor—. Son planes para lo bueno y no para lo malo, para darles un futuro y una esperanza.
- Juan 15:16 No me escogieron ustedes a mí, sino que yo los escogí a ustedes y los comisioné para que vayan y den fruto, un fruto que perdure.
- 1 Corintios 1:28-29 También escogió Dios lo más bajo y despreciado, y lo que no es nada, para anular lo que es, a fin de que en su presencia nadie pueda jactarse.
¿Pero qué pasa con nuestro propósito?
a) ALGUNAS VECES NOS VAMOS POR NUESTRA PROPIA VOLUNTAD AL DESIERTO
Huimos de nuestro propósito por las circunstancias que nos incomodan.
- Génesis 16.6: Entonces Sarai comenzó a tratar a Agar con tanta dureza que al final ella huyó.
- Génesis 16.7-8: El ángel del Señor la encontró en el desierto junto a un manantial … Agar, sierva de Sarai, ¿de dónde vienes y hacia dónde vas?
Dios todo lo sabe pero nos hace las preguntas precisamente para hacernos pensar y encontrar una respuesta. Pero muchas veces no tenemos la respuesta. Amiga, ¿de qué huyes? Mientras no persigas tu propósito, tu vida se traducirá a experimentar y huir.
La pregunta del ángel, ¿de dónde vienes y hacia dónde vas?, se parece a la declaración del salmista: Aun cuando yo pase por el valle más oscuro, no temeré, porque tú estás a mi lado (Salmo 23.4). Ambas frases nos sugieren que hay un transitar por un tiempo de incertidumbre, pero que no se quedará para siempre en nuestras vidas. Pero Dios siempre estará a nuestro lado y aunque huyamos, no nos dejará solas.
Dios encuentra a Agar y le confirma su propósito:
Cuando Dios se aparece a Agar podría haberla criticado y excluirla de sus labores. Tal vez, eso hubiésemos hecho nosotras con alguien que deja el trabajo botado. Pero Dios no es como nosotras (menos mal) y se acercó a Agar para confirmarle su propósito.
- Génesis 16.10 Después añadió: —Yo te daré más descendientes de los que puedas contar. Iba a ser la madre, abuela, bisabuela… de muchos.
Dios encuentra a Agar y le confirma su compañía:
Agar estaba destruida, tal vez se sentía sola e incomprendida. Ciertamente, su angustia no comenzó en el desierto sino mucho tiempo antes.
- Génesis 16.11 El ángel también dijo:—Ahora estás embarazada y darás a luz un hijo. Lo llamarás Ismael (que significa “Dios oye”), porque el Señor ha oído tu clamor de angustia.
Amiga, no estamos solas. El Rey del universo está interesado en consolarte y no desde lejos. Viene a donde estás y te consuela. Ha contado tus lágrimas y las guarda como un gran tesoro.
Dios encuentra a Agar y le confirma su relación:
Me he dado cuenta que cada crisis de fe o cada dificultad finaliza con un conocimiento mayor de quién es Dios. Nos revela parte de su carácter y podemos confiar más en Él. Lo mismo le pasó a Agar:
- Génesis 16.13: A partir de entonces, Agar utilizó otro nombre para referirse al Señor, quien le había hablado. Ella dijo: «Tú eres el Dios que me ve»
Antes que muriera mi padre, me refería a Dios como Dios o Señor. Incluso a veces usaba nombres como Juez Justo, Señor de los Ejércitos y algunos otros. Pero, cuando pasé por esa orfandad y Dios se revela como Padre, utilicé otros nombres para referirme a Él.
b) ALGUNAS VECES DIOS NOS LLEVA AL DESIERTO
Pareciera un castigo, pero si vagamente tratamos de conquistar la perspectiva de Dios, entenderemos que el desierto puede llegar a ser un gran lugar para crecer.
Isaac ya había nacido y la historia dice que Ismael lo molestaba. Por tal razón, Sara le pide a Abraham que expulse a Agar y a su hijo, a lo cual Abraham se resistió.
- Génesis 21.12: …pero Dios le dijo a Abraham: «No te alteres por el muchacho y tu sierva. Haz todo lo que Sara te diga…
En otras palabras, Dios estaba de acuerdo que Agar vaya al desierto junto a su hijo Ismael. Algo grande iba a hacer ahí.
- V.14: ella anduvo errante por el desierto (sin propósito, sin saber dónde ir)
- v.15: se acabó el agua
No sé si esto te identifica pero a muchas nos ha pasado que cuando las cosas van mal, todavía pueden ir peor. Andar errante, sin propósito en la vida, cuando pareciera que no valemos nada, más encima «se acabó el agua», ya no hay más esperanza. El único sustento que nos aseguraba la vida se acababa. En otras palabras, vienen a nuestra mente razones para renunciar a todo: adiós propósito, adiós llamado, adiós ministerio.
Ante este escenario, comenzamos a buscar soluciones humanas y luego abandonamos definitivamente lo que se nos había encomendado:
- v.15 … puso al muchacho a la sombra de un arbusto
- … entonces se alejó… se echó a llorar…no quiero ver morir al muchacho
Pero Dios tiene cuidado de todo y está en control, aunque creemos que está lejos:
- v.17: Dios escuchó llorar al muchacho
Dios la encuentra en el segundo desierto y le ratifica su tarea
- … el ángel le dice a Agar: Agar ¿qué pasa? No tengas miedo, anda …Ve a consolarlo
Dios le ratifica su PROPÓSITO. Asimismo es con nosotras. Me imagino la ternura con la cual le habló: ¿Qué pasa, mi pequeña? y junto con la ternura la invita a retomar su tarea. Amiga, Dios te habla con ternura y te dice que vuelvas a tu ministerio, que te hagas cargo de tu propósito, de lo que Dios te ha encargado.
Dios la encuentra en el segundo desierto y abre sus ojos
La historia sigue:
- v.19: Entonces Dios abrió los ojos de Agar … y ella vio un pozo lleno de agua. Enseguida llenó su recipiente con agua y dio de beber al niño.
Esta escena me conmueve. El Dios del universo se acerca para abrir los ojos de la que no ve. Hasta me imagino con la suavidad que sus manos tocaron el rostro de Agar. El mismo que nos trata como el vaso más frágil (1 Pedro 3.7), no nos enjuicia sino restablece nuestros sentidos para enfocarnos en Él y en el poder de su fuerza. Curiosamente, el pozo siempre estuvo allí, sólo que ella no lo veía. Así como tantas veces la solución está a nuestro lado y no la vemos. Dios le reveló un pozo lleno de agua que significaba su Provisión, su Presencia y su Espíritu a favor de ella.
El final es maravilloso: El muchacho creció en el desierto, y Dios estaba con él. En algunas ocasiones, Dios no cambia la condición pero promete seguir a tu lado.
El profeta Oseas lo afirma claramente: Pero luego volveré a conquistarla. La llevaré al desierto y allí le hablaré tiernamente (2.14). No quiere traer juicio sobre ti, quiere estar a solas contigo, sin más distracciones para disfrutar a su pequeña niña.
CONCLUSIÓN
Dios se mantiene fiel a sus promesas aunque a veces las personas compliquen el proceso
- El Padre te integra a su familia
- El Padre te hace verdaderamente libre
- El Padre te adopta como hija
- El Padre tiene un propósito para tu vida
- El Padre no quiere que huyas
- El Padre te oye y te ve
- El Padre cumple sus propósitos incluso en el desierto
- El Padre te conoce y aún así te amó
- El Padre cumple sus promesas
- El Padre te trata con ternura
- El Padre te restaura
Amiga, piensa en lo siguiente:
- ¿Qué mentiras te han tenido en esclavitud?
- ¿Qué llamado/propósito has dejado de lado?
- ¿En qué desierto estás?